El sindicato Unión Nacional de Trabajadores se solidariza con las más de 20 familias que viven en la Casa Cuartel de la Guardia Civil de Puente Colgante.
En los últimos días, los residentes están recibiendo un documento oficial por el que se les informa de que el "perímetro exterior del inmueble puede ser acordonado en cualquier momento" y que "se pueden crear zonas de exclusión de seguridad dentro del propio edificio si así lo aconseja la situación puntual de la estructura".
Para más inri les aconsejan que "no sobrecarguen sus casas con un peso excesivo tanto de personas como de muebles a la hora de una hipotética mudanza".
Llevamos años esperando a que se haga efectivo el acuerdo que firmó la Junta de Castilla y León con el Ministerio del Interior en 2010 para reubicar a los guardias civiles a otros acuartelamientos.
No puede ser que desde la casta política no se acceda a reubicar a los guardias civiles y sus familias, y a la vez tengan la valentía de mandarles avisos que demuestran que su vivienda está en ruinas.
Desde la UNT apoyamos a las distintas asociaciones de Guardias Civiles que llevan años denunciando esta situación, sin recibir ninguna solución satisfactoria.
Esperamos y deseamos que la Administración no actúe cuando se produzca alguna desgracia. Y si en Puente Colgante no se actúa pasará tarde o temprano.
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